Ciao ragazzi!
Hace un mes comenzó una nueva aventura. Estaba inquieto, acelerado y nervioso, y no era por haber encontrado a la expedición del Sevilla FC en el aeropuerto mientras facturaba las maletas, ni por haberme hecho una foto con mi mejor amigo y Romaric, sino porque me encontraba a dos horas y medias de un gran cambio.
Al principio pensaba que que el italiano sería fácil de aprender, pero no era consciente de la carencia de vocabulario que tenía, ya que no es suficiente con añadir una i al final de las palabras españolas para hablar otra lengua. De hecho, haciendo esto, lo único que hacemos es hablar siempre en masculino y plural :) Sin embargo, ha pasado un mes, y sin apuntarme a curso alguno, tanto españoles como italianos me felicitan por la soltura que he conseguido en tan poco tiempo. No sé si será porque de verdad se me dan bien los idiomas, porque los andaluces tenemos muy poca vergüenza y nos hacemos entender hablando con todos, o un poco de ambas.
Pero en el fondo, el mundo es un pañuelo y prepara grandes sorpresas, como por ejemplo, encontrarse al bajar de cada avión o tren a la misma pareja andaluza esperando el autobús contigo, o reencontrarte con uno de tus mejores amigos de la infancia en la puerta de la discoteca mientras hacíais cola para entrar.
Por contra, el inicio académico ha sido caótico. No he podido formalizar mi situación como estudiante universitario hasta ahora, tampoco he podido confirmar casi todas, mis clases, el proyecto final de carrera hasta ahora, porque gran parte de los investigadores y docentes de las carreras ciéntifico-técnicas de Padova están en huelga de docencia debido a un recorte presupuestario en investigación que ha realizado el gobierno. De hecho, la coordinadora erasmus de ingeniería se ríe conmigo porque soy el que más veces lo ha visitado para confirmar las clases de todo el curso y localizar a los profesores, hasta el punto de pasarme el teléfono para que hablase directamente con ellos y por iniciativa mía me diesen cita para comentar mi situación y saber como podía examinarme de una asignatura que no se imparte este año.
Y es que la vida está hecha de una de cal y una de arena. Aproximadamente dos semanas después de mudarme, volvía a casa para asistir a una boda cercana, y desafortunadamente vivimos el día antes la pérdida de un ser querido. Resultó duro mantener la compostura y evitar las miradas y preguntas de los demás por tu familia para no robar el protagonismo ni el día de alegría a los novios, pero casi toda mi familia tenía un papel trascendente en la ceremonia y debíamos asistir, y por suerte, los buenos amigos siempre responden y entre todos me ayudaron a llevar al fin de semana lo mejor posible e incluso llevarme al aeropuerto de vuelta cuando mi familia se encontraba ocupada con otros menesteres.
Y por cierto, he visitado Treviso, lugar al que quería ir solo porque conozco una pizzería con el mismo nombre y quería hacer la gracia ;) Es un pueblo pequeño del norte de Italia donde o bien tienen una renta muy alta, o les gusta exhibir sus bienes, porque es un pueblo antiguo que está lleno de BMW's y otros coches de clase alta.
Y por cierto, el tren es mucho más barato que en España. Un recorrido de unos 120km no llega a los 7,50€ en tren regional, mientras que en España uno similar cuesta cerca de 13€.
Y para los apasionados del fútbol, deciros que si todo va bien, es posible que el próximo miércoles me encuentre en Milán viendo el partido de Liga de Campeones entre el AC Milano y el Real Madrid CF en San Siro. Un partido de esos cualesquiera de la televisión es un estadio normal y corriente ;)
Y bueno, estoy seguro de que me dejo muchas cosas en el tintero, pero creo que es suficiente por ahora.
Un abrazo a todos y sonreid siempre,
Spekkio :)
jueves, 28 de octubre de 2010
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